Preparación de la uña natural:
Se realiza una limpieza profunda, retirando residuos de esmalte y cutículas, y se matifica la superficie de la uña para asegurar una mejor adherencia.
Aplicación del tip o extensión:
Se selecciona el tamaño y la forma adecuada del tip (extensión) o se construye directamente sobre la uña con acrílico según la técnica elegida.
Moldeado y esculpido:
Se aplica la mezcla de líquido monómero y polvo acrílico sobre la uña, dándole forma y grosor uniformes, adaptados al estilo deseado (cuadradas, almendradas, stiletto, coffin, etc.).
Secado y sellado:
El acrílico se endurece en pocos minutos, se lima y se perfecciona para lograr un acabado suave y natural.
Decoración y esmaltado (opcional):
Se aplican esmaltes tradicionales, semipermanentes o diseños personalizados según tu preferencia.